Según BlockBeats, el fundador de OpenAI, Sam Altman, expresó que la empresa ni necesita ni desea garantías del gobierno de EE. UU. para sus centros de datos. Enfatizó que el gobierno no debería determinar artificialmente los ganadores y perdedores del mercado, ni los contribuyentes deberían rescatar a empresas que toman malas decisiones comerciales o fracasan en el mercado. Altman sugirió que, aunque podría ser razonable que el gobierno construya y posea su infraestructura de IA, los beneficios deberían recaer en el propio gobierno. Imaginó un escenario donde el gobierno compra una potencia computacional sustancial y decide su uso, potencialmente a un costo de financiamiento más bajo, lo que podría ser significativo para las reservas estratégicas de computación nacional. Sin embargo, esto debería servir a los intereses del gobierno, no de las empresas privadas.
OpenAI anticipa que sus ingresos anuales superarán los $20 mil millones este año, con proyecciones para crecer hasta cientos de miles de millones para 2030. La compañía espera aproximadamente $1.4 billones en compromisos de inversión durante los próximos ocho años, lo que requiere un crecimiento continuo de los ingresos, cada duplicación representa un desafío significativo. No obstante, OpenAI sigue confiando en sus perspectivas.
Abordando las preocupaciones sobre si OpenAI tiene como objetivo convertirse en 'demasiado grande para fracasar', Altman negó firmemente esta noción. Afirmó que si OpenAI fracasa y no puede recuperarse, debería fallar, permitiendo que otras empresas continúen sirviendo a los clientes de manera efectiva. Esto, argumentó, es el enfoque operativo correcto, con el objetivo de convertirse en una empresa altamente exitosa mientras acepta la responsabilidad por cualquier error.
En una era donde la IA puede llevar a importantes avances científicos pero requiere recursos computacionales sustanciales, OpenAI tiene como objetivo estar preparado para este momento. Altman señaló que el día en que la IA pueda resolver problemas críticos, como combatir enfermedades mortales y ofrecer los beneficios de la inteligencia general artificial (AGI) a la humanidad, ya no se ve como algo distante. La misión de OpenAI es aplicar la IA para resolver problemas complejos y llevar los beneficios de la AGI a las personas lo más rápido posible.

