Coinbase, una de las plataformas de criptomonedas más grandes de Estados Unidos, ha solicitado formalmente una carta de empresa fiduciaria nacional a la Oficina del Contralor de la Moneda (OCC), un regulador bancario federal clave. Este movimiento subraya los esfuerzos de la empresa por fortalecer su marco de cumplimiento y expandir el alcance de los servicios que puede ofrecer a los clientes institucionales mientras mantiene los activos digitales integrados en el sistema financiero más amplio.

El anuncio se realizó en un comunicado de la empresa, donde Greg Tusar, Vicepresidente de Productos Institucionales de Coinbase, explicó la motivación detrás de la solicitud. Según Tusar, obtener una carta nacional simplificaría la supervisión regulatoria de nuevos productos y ayudaría a Coinbase a entregar innovación dentro de una estructura supervisada federalmente. “Una carta de la OCC simplificará la supervisión de nuevos productos y fomentará la innovación continua, integrando activos digitales en las finanzas tradicionales. No somos la primera empresa de criptomonedas en solicitar una carta federal, ni seremos la última”, dijo Tusar.

Es importante destacar que Coinbase aclaró que su solicitud no es un intento de convertirse en un banco tradicional. En cambio, la carta de fideicomiso nacional permitiría a Coinbase operar con aprobación federal como una compañía fiduciaria, ofreciendo custodia, gestión de activos y otros servicios fiduciarios, sin requerir una licencia bancaria completa que implique la aceptación de depósitos o préstamos.

Coinbase no está sola en la búsqueda de esta ruta. Otras grandes empresas de criptomonedas, incluidas Paxos, BitGo, Ripple y Circle, también han solicitado cartas de fideicomiso o de banca a la OCC en los últimos años. Esta ola de solicitudes comenzó bajo la administración de Trump, cuando los reguladores señalaron un enfoque más abierto para integrar las empresas de activos digitales en el sistema financiero de EE. UU.

El marco de la carta de fideicomiso de la OCC se ha convertido cada vez más en un camino para que las empresas de activos digitales construyan credibilidad con los inversores institucionales que exigen una mayor supervisión regulatoria. Para Coinbase, asegurar una licencia así podría facilitar el lanzamiento de productos de custodia regulados, ofrecer servicios de activos tokenizados y expandir asociaciones con instituciones financieras tradicionales.

El movimiento se produce en un momento en que Coinbase se ha estado posicionando como un puente entre los mercados nativos de criptomonedas y Wall Street, especialmente a medida que la adopción institucional de activos digitales crece. Con grandes administradores de activos, fondos de cobertura y bancos explorando la tokenización y la liquidación en blockchain, Coinbase busca posicionarse como un proveedor de infraestructura clave en este paisaje emergente.

Si bien la OCC aún necesitará revisar y aprobar la solicitud, el esfuerzo de Coinbase refleja la relación en maduración entre las empresas de activos digitales y los reguladores federales. Si se concede, la carta de fideicomiso nacional no solo fortalecería la posición de Coinbase en el mercado de EE. UU., sino que también serviría como otro hito en el esfuerzo más amplio por alinear los servicios de criptomonedas con las finanzas tradicionales.