La caída a largo plazo del dólar estadounidense impulsa una perspectiva alcista para el bitcoin y el oro.
El dólar estadounidense (DXY) está experimentando un declive estructural, y los analistas apuntan a una transformación monetaria más profunda que podría impulsar la demanda de Bitcoin y otros activos escasos. Desde principios de 2025, el índice del dólar estadounidense ha caído un 11%, alcanzando niveles no vistos desde abril de 2022. Las reacciones del mercado se han mantenido moderadas, pero los analistas advierten que esto podría ser el comienzo de una transición a largo plazo en el sistema financiero global.
Según la macroestratega independiente Lyn Alden, un debilitamiento del dólar no solo es probable, sino que podría ser necesario para estabilizar la economía estadounidense y apuntalar la liquidez global. En su boletín del 4 de mayo, Alden argumentó que una "retirada controlada de la hegemonía del dólar" podría ser una de las pocas estrategias viables que le quedan a Estados Unidos para gestionar su enorme carga de deuda y sus desequilibrios económicos.
Por qué un dólar más débil puede ser deliberado
El sistema financiero estadounidense depende en gran medida de la expansión crediticia y la liquidez en dólares. Con 102 billones de dólares en deuda denominada en dólares y tan solo 5,8 billones de dólares en moneda base en circulación, el sistema se asemeja a un juego de sillas musicales, afirmó Alden. Durante periodos de tensión de liquidez, como marzo de 2020, la Reserva Federal ha tenido que inyectar billones de dólares en capital de emergencia para evitar el colapso.
Pero esta intervención recurrente ha generado riesgos inflacionarios a largo plazo, especialmente para los estadounidenses de bajos ingresos. Ahora, bajo la presión política de la administración Trump y en medio de un creciente proteccionismo comercial, Estados Unidos parece estar alejándose de las políticas de un dólar fuerte.
“Considero que Estados Unidos y, de hecho, el sistema financiero mundial probablemente estén iniciando una transición a muy largo plazo”, escribió Alden.
BTC vs. DXY: Una correlación inversa histórica
Bitcoin (BTC), que actualmente cotiza a $97,133, ha mostrado históricamente una correlación inversa con el índice del dólar estadounidense. Cuando el DXY se debilita, los inversores suelen recurrir a Bitcoin y al oro como reservas de valor. Los analistas señalan que las principales subidas de BTC a menudo han seguido caídas sostenidas del DXY, incluyendo las corridas alcistas de 2020 y 2024.
Desde principios de abril de 2025, el DXY ha caído por debajo de 100 por primera vez en dos años, mientras que Bitcoin ha subido más del 15%, lo que refleja el creciente interés de los inversores institucionales. Si las tendencias pasadas se mantienen, esta divergencia podría marcar el inicio de una nueva expansión del precio de BTC hacia los $100,000 y más.

Rotación global hacia activos de reserva neutrales
A medida que se erosiona la confianza en el dólar, tanto Bitcoin como el oro se consideran cada vez más activos de reserva neutrales. Varios fondos soberanos, entidades estatales e inversores institucionales ya están optando por BTC:
El Salvador y Bután están minando y comprando Bitcoin directamente.
El fondo de pensiones estatal de Wisconsin y Mubadala de Abu Dhabi tienen exposición al contado al ETF de BTC.
El fondo soberano de riqueza noruego posee BTC indirectamente a través de acciones en Strategy, Coinbase y Riot.
Actualmente, más de 13.000 empresas e instituciones estadounidenses tienen alguna exposición a Bitcoin.
Al mismo tiempo, el comercio mundial se liquida cada vez más en divisas distintas del dólar. Los pagos transfronterizos en yuanes alcanzaron un récord en marzo, y el euro se ha apreciado un 10 % frente al dólar desde febrero de 2025, a pesar de la bajada de los tipos de interés del Banco Central Europeo.
La desdolarización ya no es una teoría: está sucediendo
El abandono global del dólar, teorizado desde hace tiempo, está transformando activamente el comercio, las finanzas y la gestión de reservas. En este contexto, Bitcoin destaca por su neutralidad política, su suministro fijo y su naturaleza sin fronteras.
Mientras Estados Unidos lidia con el aumento de los déficits, el riesgo geopolítico y la fragilidad fiscal, la propuesta de valor de Bitcoin como “oro digital” y alternativa monetaria está ganando terreno, según Cointelegraph.