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Japón está preparando una nueva estructura regulatoria para prohibir el uso de información privilegiada en el mercado de criptomonedas, colocando el sector bajo la Ley de Instrumentos Financieros y Cambio (FIEA). La medida permitirá a la Comisión de Vigilancia de Valores Mobiliarios (SESC) investigar transacciones sospechosas, imponer multas proporcionales a las ganancias ilícitas y remitir casos graves para investigación criminal. El objetivo es alinear las criptomonedas con las mismas reglas aplicadas a los mercados tradicionales, garantizando transparencia y protección al inversionista. El proyecto define claramente el insider trading de criptoactivos y crea una base institucional centralizada de supervisión, sustituyendo la autorregulación limitada de la JVCEA. La propuesta debe ser concluida hasta finales de 2025, con legislación prevista para 2026. La iniciativa busca evitar manipulaciones de precios y filtraciones de información antes de listados, además de aumentar la confianza institucional y fortalecer la transparencia y la igualdad de acceso a la información en el mercado japonés. Las exchanges locales deben intensificar sus controles internos e inversiones en conformidad a medida que la nueva legislación se aproxima.