El Ministerio de Relaciones Exteriores de Turquía condenó enérgicamente la interceptación por parte de Israel de la flotilla con destino a Gaza, calificándolo de "un acto de terrorismo" y acusando a las fuerzas israelíes de violar el derecho internacional y poner en peligro a los civiles en aguas internacionales.
Israel rechazó las acusaciones, afirmando que la flotilla había infringido un bloqueo naval legal. La Marina israelí declaró que emitió múltiples advertencias y ofreció alternativas seguras para la entrega de ayuda humanitaria, pero los organizadores se negaron, lo que llevó a la interceptación.