Las meme coins ocupan un espacio curioso en el mercado de criptomonedas. Nacidas como una broma o experimento, han conseguido atraer a millones de inversores y hoy mueven miles de millones de dólares en capitalización.
En 2025, dos de ellas siguen en la cima de las discusiones: el Dogecoin (DOGE) y el Shiba Inu (SHIB).
Con los dos activos en alza en el actual ciclo de mercado, surge la pregunta: ¿cuál de ellos tiene más sentido como inversión? Para responder, vamos en este artículo a comparar desempeño, fundamentos, comunidades y riesgos.
Ah, antes de continuar, vale un adendo: todos los valores que se enumeren son relativos al final de agosto de 2025, ¿está bien?
1. Situación actual: precio y dinámica del mercado
Actualmente, el Dogecoin se está negociando en torno a US$ 0,27, acumulando una valorización expresiva de +67,17% en los últimos tres meses. El movimiento alcista comenzó a mediados de junio, cuando el precio salió de la franja de US$ 0,17 y alcanzó niveles superiores a US$ 0,28 en agosto.
A pesar de esta recuperación robusta, el activo sigue dentro de un patrón de volatilidad, con correcciones puntuales después de cada pico de valorización. La entrada de grandes inversores (ballenas) y el interés especulativo del retail siguen siendo los principales vectores de impulso del DOGE.

El Shiba Inu se negocia actualmente a US$ 0,000013, registrando +15,11% en los últimos tres meses. Después de alcanzar un pico relevante en julio, cerca de US$ 0,000016, el token volvió a corregir, estabilizándose en torno a la franja de US$ 0,000013.
La narrativa en torno a Shibarium, su solución de segunda capa, sigue siendo el factor que sostiene el compromiso de la comunidad. Sin embargo, el rendimiento reciente muestra que el optimismo del mercado permanece inestable y vulnerable a movimientos de realización de ganancias.

2. Comparativo directo: mercado, blockchain y comunidad
Cuando miramos los números del mercado, Dogecoin mantiene una gran ventaja. Su capitalización de mercado gira en torno a US$ 35 mil millones, mientras que Shiba Inu tiene poco más de US$ 7 mil millones. Además, el DOGE registra volúmenes diarios de negociación mucho mayores, lo que significa más liquidez y facilidad de entrada y salida para los inversores.
Desde el punto de vista técnico, el DOGE opera en su propia blockchain basada en proof-of-work, lo que lo hace independiente. Por otro lado, el SHIB es un token ERC-20 en la red Ethereum, pero ha estado ampliando su alcance con productos como Shibarium, el intercambio descentralizado ShibaSwap y el ecosistema de tokens asociados (BONE y LEASH).
En la parte de comunidad, ambos son fuertes. Dogecoin cuenta con el peso histórico de ser la primera meme coin y de ya haber recibido apoyo incluso de figuras como Elon Musk. Shiba Inu, por su parte, ha construido una base comprometida que se identifica como “ShibArmy”, con presencia masiva en redes sociales y participación activa en votaciones y propuestas de gobernanza.
3. Puntos fuertes de cada memecoin
Dogecoin tiene como principal fuerza el pionerismo y la amplia adopción. Se acepta como forma de pago en algunos establecimientos y se usa con frecuencia en transacciones rápidas y simples. Además, su alta liquidez garantiza mayor estabilidad en momentos de pico de negociación.
El Shiba Inu, por otro lado, intenta distanciarse de la idea de ser solo un “clon de Doge”. Su diferencial es el esfuerzo en construir un ecosistema completo, con DeFi, NFTs, metaverso y ahora soluciones basadas en inteligencia artificial. Esta visión más amplia atrae a inversores que buscan exposición a narrativas tecnológicas más allá del meme.
4. Principales riesgos y limitaciones de cada proyecto
Ninguna meme coin está libre de riesgos, y entender esto es fundamental para quienes están entrando ahora en el mercado.
Dogecoin sufre con el hecho de aún tener una utilidad limitada. Aunque es una moneda estable dentro del universo meme, no posee tantas innovaciones tecnológicas o proyectos paralelos. Su valor depende mucho de la comunidad y la especulación.
Ya el Shiba Inu enfrenta el desafío de la oferta gigantesca de tokens en circulación — más de 589 trillones. A pesar de las iniciativas de quema, reducir esta oferta de forma significativa es una tarea lenta, lo que limita la posibilidad de alzas expresivas en el precio.
Otro punto de atención es que ambas dependen mucho del sentimiento del mercado. Si el apetito por el riesgo disminuye, las meme coins están entre los primeros activos en sufrir caídas bruscas.
5. ¿Cuál elegir? Escenarios para DOGE o SHIB
La decisión entre invertir en Dogecoin o Shiba Inu depende mucho de lo que buscas. Dogecoin puede ser más interesante para quienes prefieren liquidez, simplicidad y un historial más consolidado. Su valor proviene principalmente del reconocimiento global, de la facilidad de negociación y del peso cultural de ser la primera memecoin.
El Shiba Inu, por otro lado, puede atraer a quienes buscan un ecosistema en expansión y creen que las narrativas de DeFi, metaverso y tokens utilitarios asociados ganarán relevancia. Aunque es más arriesgado, el SHIB ofrece un mayor potencial de crecimiento si logra cumplir con sus promesas tecnológicas.
En resumen: si el objetivo es seguridad relativa dentro del mundo de las memecoins, el DOGE tiende a ser la elección más sólida. Si la idea es apostar en innovación y aceptar un riesgo mayor, el SHIB puede ser más atractivo.
¿Quién se lleva la mejor parte en 2025?
La disputa entre Dogecoin y Shiba Inu muestra bien cómo las memecoins han evolucionado de simples bromas a activos que mueven miles de millones. En 2025, Dogecoin sigue liderando en términos de liquidez y capitalización, mientras que Shiba Inu apuesta por expandir su ecosistema y ofrecer nuevos usos más allá del meme.
Para inversores principiantes o intermedios, la mejor estrategia tal vez no sea elegir solo uno, sino entender el papel de cada uno en la cartera. Tener una pequeña exposición a DOGE puede traer estabilidad dentro del universo meme, mientras que SHIB puede funcionar como una apuesta en innovación y narrativas futuras.
Lo más importante es mantener los pies en la tierra: las memecoins son altamente volátiles y deben representar solo una pequeña parte de un portafolio diversificado. El secreto es invertir valores que estés dispuesto a arriesgar, sin comprometer tu estrategia a largo plazo.
¿Y tú, tienes Dogecoin, Shiba Inu u otras memecoins en la cartera?


