El "Gran Hermoso Proyecto de Ley" de Trump está sacudiendo a América, pero ¿es la victoria que prometió? Este masivo proyecto de reconciliación—repleto de recortes fiscales, recortes de Medicaid, reducciones de cupones de alimentos y cambios en la política energética—muestra el estrangulamiento del filibustero en el Congreso. Necesitar 60 votos acaba con la deliberación, forzando todo en un mega-proyecto caótico e ilegible. ¡Nadie, ni siquiera los legisladores, sabe qué hay en él! Esto no es gobernar; es un lío democrático que deja a los votantes sin saber a quién responsabilizar.

Las vibraciones regresivas del proyecto golpean fuerte: aumentar las deducciones fiscales estatales a $40K y las exenciones fiscales de sucesiones a $30M grita favoritismo hacia la élite, no populismo. La base de Trump—gente de clase trabajadora—enfrenta recortes en la atención médica y en los cupones de alimentos, con déficits que se disparan en $4T. Los estados rojos pierden mucho en créditos de energía renovable, a pesar de su impulso económico. Trump lo vende como lo mejor, pero es el viejo GOP: recortes de impuestos para los ricos, migajas para el resto.

Su enfoque de tarifas por orden ejecutiva elude al Congreso, esquivando un impacto duradero como el ACA o la Gran Sociedad. Es apariencia, no sustancia—fácilmente deshecho por el próximo presidente. ¿Notarán sus votantes la desconexión? ¿O es suficiente la lealtad a la guerra cultural? La confianza en el Congreso está en el suelo, y este proyecto muestra por qué. Es hora de deshacerse del filibustero y dejar que las mayorías gobiernen, para bien o para mal. #TrumpBill #Reconciliation #Congress #USPolitics #OneBigBeautifulBill