Brian Armstrong, CEO de Coinbase, ha declarado públicamente que compran Bitcoin semanalmente, reafirmando su postura optimista sobre la criptomoneda más grande del mundo.
El anuncio en X (anteriormente Twitter) se produjo cuando las acciones de Coinbase alcanzaron un máximo histórico de $375.07, superando su récord anterior de noviembre de 2021.
El comentario sugiere la fuerte creencia de Armstrong y su empresa en Bitcoin como un almacén de valor a largo plazo. En múltiples ocasiones, Armstrong ha sugerido que el precio de Bitcoin podría llegar algún día a millones de dólares.
Armstrong también sugirió que no pasará mucho tiempo antes de que las naciones empiecen a incluir Bitcoin en sus balances, un cambio que podría redefinir la demanda global y establecer el activo como un jugador en la política mundial. Algunos lo desestimaron como excesivamente especulativo, pero otros señalaron que países como El Salvador y la República Centroafricana ya se han movido en esa dirección.
Ya sea simbólico o estratégico, las compras constantes de Bitcoin de Armstrong reflejan una tendencia creciente entre los líderes de criptomonedas y los inversores institucionales que ven a BTC como una cobertura contra la inflación, la volatilidad de la moneda y el riesgo sistémico.
La confianza del mercado impulsa a Coinbase a un nuevo pico
Las acciones de Coinbase Global Inc. cerraron en el nivel más alto de la historia, culminando un repunte impulsado por la creciente aceptación de la industria de las criptomonedas en Wall Street y Washington.
Las acciones del operador de la criptobolsa subieron un 5.5% el jueves a $375.07. El anterior máximo fue de $357.39 en noviembre de 2021, solo unos meses después de que la empresa se hiciera pública a través de una cotización directa.
Las acciones de Coinbase han aumentado más de un 1,000% desde un mínimo histórico a finales de 2022, que se produjo cuando el colapso de FTX planteó preguntas sobre el futuro de los activos digitales. El regreso de la acción ocurrió a medida que los precios de las criptomonedas se recuperaron y la industria ganó poderosos nuevos aliados, incluido el presidente de EE. UU. Donald Trump. Justo el mes pasado, Coinbase fue añadido al prestigioso índice S&P 500.
Este extraordinario renacimiento se produce tras un período oscuro en la industria de las criptomonedas. FTX y otros gigantes se desplomaron en 2022, lo que llevó a una tasa de escepticismo absurdamente alta sobre los activos digitales. Pocas de las mayores plataformas quedaron ilesas, y Coinbase fue una de las pocas que no fue golpeada, dejándola como un jugador seguro en una industria caótica.
Ahora, el optimismo renovado está de vuelta. El capital institucional está entrando, los traders minoristas están regresando, y gigantes financieros como BlackRock y Fidelity están avanzando con productos criptográficos. Coinbase recientemente se unió al índice S&P 500, una señal de creciente legitimidad en las finanzas tradicionales.
Los analistas dicen que la recuperación más amplia en los precios de Bitcoin y Ethereum y una mayor claridad regulatoria están ayudando a elevar la confianza de los inversores en Coinbase. Las diversas fuentes de ingresos de la plataforma, incluidos los honorarios de negociación, los servicios de custodia y las asociaciones institucionales, también han contribuido a su rendimiento en bolsa.
Los legisladores estadounidenses impulsan el sentimiento sobre criptomonedas con un cambio de política
El regreso de Coinbase también coincide con una creciente claridad regulatoria y apoyo político a los activos digitales en los Estados Unidos. Washington se está acercando a las criptomonedas después de años de hostilidad e incertidumbre.
La legislación en el horizonte sobre stablecoins y señales más claras de la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) también están ayudando al sector a establecer normas. El respaldo bipartidista en el Congreso ha añadido un nuevo impulso a los proyectos de ley que podrían proporcionar transparencia y supervisión, particularmente en funciones críticas como la custodia, el staking y las finanzas descentralizadas.
El presidente Donald Trump ha apoyado públicamente la innovación en criptomonedas, a diferencia de administraciones anteriores. Bajo su mandato, ha habido una gran expansión de políticas en el ámbito de las criptomonedas, como la creación de una reserva de criptomonedas para el país.
Coinbase, un defensor de larga data de una regulación razonable, ha sido uno de los más vocales en comunicarse con el personal legislativo y las agencias regulatorias. Y está dando sus frutos.
Los inversores, analistas y entusiastas de las criptomonedas hoy en día ven a Coinbase no solo como una plataforma de intercambio, sino también como un puente entre la economía digital y el sistema financiero tradicional.
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