En el mundo del trading, solo una concentración extrema puede llevar a una explosión.
Uno, centrarse en patrones y gráficos específicos.
Cuando comienzas a enfocarte solo en un tipo de patrón o gráfico de trading, ya no preguntas la opinión de los demás.
Es como jugar al dominó de tres personas, solo recogiendo cartas y no jugando, pero cuando tienes una buena mano con un 'rey explosivo', cuatro doses y cuatro ases, te sientes seguro y puedes arriesgarte. En otros momentos, solo observas y no juegas.
Dos, la simplicidad y pureza del trading.
El trading puede ser tan simple que incluso un alumno de primaria puede aprenderlo, pero ¿por qué muchas personas no pueden hacerlo? La razón es que no es lo suficientemente puro.
Por ejemplo, hoy ves que este método es bueno, lo pruebas; mañana escuchas que ese patrón es bueno y cambias. Al final, no aprendes nada bien y el trading se vuelve un desastre.
Tres, la confianza que trae la concentración.
Cuando te concentras intensamente y estudias un patrón o gráfico, te llenas de confianza en tu juicio.
No cambias fácilmente tu decisión por lo que diga otra persona, sino que operas según tu propia investigación y experiencia.
Cuatro, deshacerse de pensamientos confusos y buscar la pureza.
Para tener éxito en el trading, debes deshacerte de esos pensamientos desordenados y tentaciones, manteniendo tu interior puro.
Solo concéntrate en el patrón que has elegido, practica y resume constantemente, acumulando experiencia.