Según PANews, un informe de la correduría de Wall Street Bernstein revela que varias empresas están desarrollando tesorerías alrededor de Ethereum para generar ingresos operativos a través de activos de staking y apoyar la infraestructura financiera de la red. A diferencia de las tesorerías de Bitcoin, que se centran en la liquidez y la tenencia pasiva, las tesorerías de Ethereum enfatizan los rendimientos de staking, que actualmente rinden poco menos del 3%, con fluctuaciones históricas entre el 3% y el 5%.

Bernstein estima que una tesorería de Ethereum de $1 mil millones podría generar rendimientos anuales de $30 millones a $50 millones. Sin embargo, estos rendimientos vienen con complejidades. El modelo de staking de Ethereum requiere que los poseedores desplieguen capital activamente y mejoren la supervisión de riesgos. Deshacer el staking puede tardar varios días, lo que plantea restricciones de liquidez y riesgos de desajustes de volatilidad del mercado. Estrategias avanzadas como el restaking o la agricultura de rendimiento DeFi pueden amplificar los riesgos de contratos inteligentes y de seguridad, lo que requiere que los administradores de la tesorería equilibren los rendimientos con los riesgos.

Con casi el 30% de Ethereum ya apostado y un 10% adicional bloqueado en DeFi, junto con flujos de fondos ETF continuos, se espera que la demanda se mantenga fuerte en el corto a mediano plazo, mientras que la oferta se mantenga relativamente estable. Los analistas son optimistas sobre Ethereum y su capacidad para apoyar estrategias de capital a escala de tesorería, siempre que la liquidez y el riesgo se gestionen de manera efectiva.