Según Cointelegraph, la filial estadounidense de Dolce & Gabbana ha sido desestimada de una demanda colectiva propuesta relacionada con la supuesta negligencia de su empresa matriz en una iniciativa de tokens no fungibles (NFT). El viernes, la jueza federal de Nueva York Naomi Reice Buchwald falló a favor de Dolce & Gabbana USA Inc., afirmando que no era un "alter ego" de su empresa matriz italiana, Dolce & Gabbana SRL.

La demanda, presentada inicialmente en mayo de 2024 y revisada en septiembre, fue presentada por un grupo de compradores de NFT. Afirmaron que Dolce & Gabbana y su filial en EE.UU. eran esencialmente la misma entidad y no habían cumplido con las promesas relacionadas con el proyecto NFT "DGFamily" lanzado en 2022, alegando haber retenido más de 25 millones de dólares de la empresa. El futuro de la demanda es incierto, ya que Dolce & Gabbana USA fue el único demandado con sede en EE.UU. Otros demandados incluían el mercado de NFT con sede en Dubái UNXD Inc. y Bluebear Italia SRL, con sede en Italia, el creador de la colección de NFT "inBetweeners", ninguno de los cuales fue notificado con la denuncia.

La denuncia acusó a Dolce & Gabbana y UNXD de crear y promover conjuntamente el proyecto DGFamily, que prometía a los compradores beneficios de "alto valor" que se entregarían trimestralmente durante dos años. Estos beneficios incluían supuestamente atuendos digitales para el metaverso de Decentraland, ropa física y eventos en vivo para los poseedores de NFT. Sin embargo, la demanda alegaba que Dolce & Gabbana no cumplió con la entrega del conjunto completo de beneficios prometidos mientras retenía millones de las ventas de NFT.

Dolce & Gabbana USA buscó desestimar la demanda en enero, argumentando que era una entidad distinta no involucrada en las actividades de NFT de su empresa matriz italiana. La filial estadounidense sostuvo que no había participado en ninguna empresa conjunta con UNXD o cualquier otra entidad para vender, publicitar o promover NFT. La firma mantuvo que la evidencia presentada en la denuncia indicaba que el proyecto NFT se originó en su empresa matriz en Italia y no estableció suficientemente una conexión entre las entidades estadounidenses e italianas.

La jueza Buchwald concluyó que la demanda era "manifiestamente insuficiente para resistir la moción de desestimación de D&G USA", ya que no logró diferenciar entre las acciones de las empresas estadounidenses e italianas, refiriéndose a ellas colectivamente como "Dolce & Gabbana". La demanda enmendada destacó una "superposición en propiedad, funcionarios, directores y personal" entre las dos firmas, incluidos ejecutivos compartidos. Sin embargo, no proporcionó ejemplos específicos de cómo estos ejecutivos estaban involucrados en el proyecto NFT. La jueza Buchwald afirmó que los demandantes no habían demostrado adecuadamente que D&G S.R.L. dominaba completamente a D&G USA, a pesar de los supuestos empleados y espacio de oficina compartidos.