OPINIÓN: EL BITCOIN NO SOLO ES MEJOR QUE EL DINERO FIAT, ES LA ÚNICA MONEDA HONESTA QUE QUEDA

En 2025, la misma gente de Bitcoin que no entendió en 2010 vale más que el PIB del 90% de los países del mundo.

Mientras tanto, el real, el dólar, el euro? Aún se están imprimiendo como si no hubiera un mañana.

El real brasileño ha perdido más del 95% de su poder adquisitivo desde el Plano Real en los años 90. El dólar estadounidense ha perdido el 97% desde 1913.

Eso no es dinero. Eso es papel de colores con presidentes muertos en él.

El Bitcoin es diferente porque es el primer dinero en la historia con un costo de producción real.

No es fe, no es decreto, no es promesa política. Es electricidad convertida en escasez digital irrompible. Como lo dijo Elon:

"La energía es la verdadera moneda. No puedes legislar la energía. No puedes simplemente aprobar una ley y de repente tener mucha energía… El Bitcoin se basa en la energía."

Los gobiernos pueden imprimir tanto fiat como quieran.

Pueden hacer funcionar la impresora de dinero hasta que se acabe el papel.

Pero no pueden imprimir kilovatios-hora.

Para crear un nuevo bitcoin, alguien tiene que gastar electricidad real, en hardware real, en granjas de minería que consumen más energía que Argentina.

¿Quieres confiscárselo? Buena suerte (lo han intentado).

¿Quieres inflarlo? Imposible (21 millones de monedas como límite, punto final).

¿Quieres prohibirlo? Los países que lo intentaron se convirtieron en chistes internacionales y perdieron miles de millones en inversiones.

El dinero fiat, por otro lado, sigue siendo la mayor máquina de transferencia de riqueza jamás inventada:

Desde los pobres y la clase media (que tienen efectivo) hasta los ricos y conectados (que compran activos reales antes de que la impresora se caliente).

Y si aún no lo entiendes en 2025… definitivamente lo entenderás la próxima vez que tu moneda fiat local valga menos que papel higiénico.

De nuevo.

Fuente: "Un sistema de efectivo de igual a igual", "La gran ficción: propiedad, economía, sociedad y la política del declive", - Elon Musk