Recientemente, en el mercado se escucha por todas partes el sonido de "se ha ido el toro, ha llegado el oso", y todos están profetizando una caída.
De hecho, esta ronda de estafas ha terminado para muchas criptomonedas, y muchos proyectos antiguos están completamente acabados.
Pero en la crisis hay oportunidades; cuanto más desesperada es la emoción, más fácil es gestar una reversión.
Mira ZEC, que ha subido 30 veces en tres meses, pero antes de eso estuvo estancado durante tres años. Ahora todos solo ven el aumento explosivo, pero olvidan esos tres años de silencio. Si puedes atrapar el próximo ZEC, depende de si tienes paciencia.
He mantenido mi juicio: la tendencia de este mercado alcista no se ha roto.
No se trata de gritar "toros" solo porque el precio sube, ni de gritar "osos" porque baja. Esos "grandes influenciadores" en el mercado que tienen ochocientos puntos de vista al día, al final solo están persiguiendo la tendencia. Los verdaderos traders son los que sostienen sus fichas, mantienen activos de calidad y esperan que el tiempo haga valer su precio.
Por supuesto, también hay que aclarar los riesgos.
Si se pierde el nivel de 100,000, el olor a tormenta se vuelve cada vez más fuerte y la liquidez está casi agotada. Los ETF han tenido cinco días consecutivos de salida neta, las instituciones se retiran, y CZ se autocrítica diciendo "cada vez que compro, me atrapan", este juego está realmente frío hasta los huesos. DeFi está sufriendo una serie de explosiones, proyectos huyen, las stablecoins se desanclan, y hay corridas en la cadena... es como un dominó financiero.
La conclusión actual solo se puede resumir en una frase: las monedas en tu billetera son las reales; todo lo demás, es solo una ilusión.

