🚨🇺🇸 Estados Unidos imprimió $6 billones en 2020 — y el daño aún se está desarrollando.
Cuando la economía se cerró, Washington intentó una "solución fácil": imprimir dinero de la nada.
El efectivo inundó Wall Street, grandes bancos y gobiernos locales — con algunos cheques lanzados al público para mantener la paz.
Parecía un rescate.
Fue un desastre en cámara lenta.
El capitalismo solía ser simple: las empresas débiles fracasaban, las fuertes sobrevivían.
Pero desde la década de 1980, los rescates se convirtieron en la norma — petróleo, Wall Street, y para 2020, todo el sistema.
¿El resultado?
🔥 Inflación récord
📈 Crecimiento artificial
💰 Billones en nueva deuda
En lugar de responsabilidad, la culpa se trasladó a las "cadenas de suministro" y a la "avaricia corporativa".
No a la impresora de dinero funcionando sin parar.
Aquí está la verdad: imprimir dinero no crea riqueza — distorsiona el tiempo.
El verdadero costo aparece más tarde, con intereses.
2020 no fue un rescate.
Fue un reinicio de tiempo prestado.
