En la noche del 22 de octubre, un registro de transferencia deslumbrante en la cadena de Bitcoin rompió el silencio del mercado: 15959 BTC fueron robados de la dirección asociada al grupo de minería Lubian, divididos y transferidos a 4 billeteras anónimas. Según el precio del mercado ese día, estos activos valen hasta 18.3 mil millones de dólares. No se trata de una simple transferencia de activos, sino de fondos que han vuelto a activarse y que han sido catalogados por el Departamento de Justicia de EE. UU. como 'dinero de crimen transnacional'. Detrás de esto se encuentra un imperio del crimen cibernético creado por la generación de los 80 en Fujian, que abarca múltiples países y enfrenta un dilema en la regulación de criptomonedas.
Un caso de robo 'autogestionado'
Volvamos a diciembre de 2020, cuando el grupo de minería Lubian, que controla el 6% de la potencia de cómputo de Bitcoin a nivel mundial, declaró repentinamente que había sido víctima de un ataque hacker, y 127,000 BTC desaparecieron. En ese momento, se consideró uno de los mayores robos en la historia de Bitcoin. Pero la investigación tres años después reveló la absurda verdad: este 'robo' fue en realidad un acto de lavado de dinero orquestado por Chen Zhi, el verdadero controlador del grupo de minería y el cerebro detrás del grupo Tai Zi.
Las operaciones de Chen Zhi son un manual de la industria del crimen: inyectó las ganancias ilegales del grupo príncipe en el parque de estafas de Camboya a la piscina de minería; estos parques están cercados con alambre de púas como “prisiones de estafa”, miles de trabajadores engañados son forzados a trabajar 16 horas diarias en “estafas de cebo”, alcanzando un beneficio diario de hasta 30 millones de dólares en su punto máximo. Y la piscina Lubian es su “lavadora de dinero”, convirtiendo dinero sucio en activos criptográficos que parecen legales a través de su negocio de minería, y luego completando la transferencia bajo la fachada de “ciberataques”. Lo más clave es que estos activos se almacenan en “billeteras débiles” con defectos de números aleatorios: debido a que los desarrolladores utilizaron generadores de números aleatorios pseudoseguros, las claves privadas de estas billeteras teóricamente pueden ser vulneradas mediante técnicas, sembrando las semillas para futuras disputas de activos.
150 mil millones de dólares en confiscaciones y los peces que escapan a la red
El 14 de octubre de 2025, el Departamento de Justicia de EE. UU. anunció la confiscación de 127,271 BTC, valorados en 15 mil millones de dólares, estableciendo un récord mundial en la confiscación de activos criptográficos. Este avance proviene de la colaboración en la aplicación de la ley internacional: después de que la policía tailandesa arrestara a un alto ejecutivo del grupo príncipe, reveló la ubicación de la computadora que almacena las claves privadas, y el FBI tomó el control de los dispositivos de forma remota, cortando el control de Chen Zhi sobre los activos. El Reino Unido congeló simultáneamente 19 propiedades de lujo y edificios de oficinas de Chen Zhi en Londres, y la Interpol emitió una alerta roja en su contra; Chen Zhi, enfrentando cargos de 40 años de prisión, desde entonces ha desaparecido.
Pero las 18,000 BTC de este movimiento inusual son precisamente los “peces que escaparon a la red” de esa gran confiscación. Los datos en la cadena muestran que estos activos nunca entraron en la lista de confiscación del Departamento de Justicia de EE. UU. y siempre han estado bajo el control de las fuerzas remanentes de Chen Zhi. Aún más alarmante es que esta es la segunda gran transferencia de esta serie de direcciones en una semana: previamente, se completó la transferencia de 11,886 BTC (aproximadamente 1.3 mil millones de dólares), lo que significa que los activos criminales que deberían estar bajo estricta vigilancia están acelerando su “invisibilidad”.
La regulación de criptomonedas es “visible pero inalcanzable”
1.8 mil millones de activos fluyendo en la noche revelan la profunda crisis de la regulación de criptomonedas. A pesar de que el Departamento de Justicia de EE. UU., con análisis en la cadena y colaboración internacional, ha confiscado 15 mil millones de dólares en dinero ilícito, los fondos transferidos por el grupo de Chen Zhi a través de billeteras distribuidas y técnicas de mezcla pueden superar esta cifra; esta transferencia utilizó la ventaja del anonimato de los activos criptográficos: 4 direcciones receptoras no tienen ninguna relación de identidad, y una vez que los fondos entran en la piscina de mezcla o en intercambios descentralizados, la dificultad de seguimiento aumentará exponencialmente.
Es aún más preocupante el “billetera débil” que genera un agujero negro de seguridad. Los estudios muestran que existen más de 227,000 billeteras defectuosas similares en todo el mundo, incluida la piscina Lubian, que en conjunto poseen 137,000 BTC; el robo de 2020 fue el resultado de que los atacantes aprovecharon las vulnerabilidades para vaciar activos en masa. Antes de este movimiento de fondos, estas direcciones habían incrustado varias veces información misteriosa en las transacciones, lo que sugiere que alguien intentó negociar la devolución de activos con los poseedores de las claves privadas, insinuando que la lucha técnica en torno a estos activos nunca se detuvo.
Cuando 1.83 mil millones de dólares en activos desaparecen en la red anónima, el pánico en el mercado vuelve a aumentar. Hasta el 23 de octubre, el mercado de criptomonedas ha estado en la zona de “miedo” durante 17 días consecutivos, con más de 130,000 personas liquidando posiciones en 24 horas, y el total de liquidaciones alcanzando 480 millones de dólares. Para los inversores, este evento ha sonado una de las campanas de alarma más gravosas: esos movimientos inusuales en la cadena que parecen independientes pueden ocultar las repercusiones del crimen transnacional; y el anonimato de los activos criptográficos, que es el halo de la innovación tecnológica, también es el paraguas de las fuerzas del crimen.
Actualmente, la SEC y la CFTC de EE. UU. están acelerando el avance del marco regulatorio de las criptomonedas, pero el cierre del gobierno ha retrasado el progreso. La trayectoria de 1.8 mil millones de dólares en fondos ilícitos parece presentar a los reguladores un examen: cuando el crimen y la tecnología están profundamente ligados, ¿cómo se puede hacer que la “luz del sol” del mercado de criptomonedas ilumine los oscuros rincones del anonimato? La respuesta, quizás, está oculta en el seguimiento y la resolución de cada movimiento inusual en la cadena.

