La naturaleza actual del mercado de criptomonedas lo hace extremadamente sensible a los cambios en el entorno geopolítico, específicamente a la guerra comercial en curso entre Estados Unidos y China, donde cualquier relajación o escalada en esta guerra tiene el potencial de redirigir capitales globales de inmediato. En un escenario de escalada, donde aumentan los aranceles y se intensifican las restricciones sobre tecnología y cadenas de suministro, el miedo se apodera de los mercados. Los inversores huyen de activos de alto riesgo hacia refugios seguros tradicionales como el dólar estadounidense o el oro físico, lo que provoca una presión de venta sobre Bitcoin y Ethereum. Esto es lo que hemos presenciado recientemente tras la amenaza de imponer aranceles del 100%. La liquidez se retira de activos que no generan un rendimiento fijo en un entorno caracterizado por la incertidumbre, y esta retirada se refleja claramente en los datos de CoinGlass sobre liquidaciones. Por otro lado, en un escenario de relajación y entendimiento comercial, el sentimiento mejora significativamente. La certidumbre regresa a los mercados y reduce el riesgo de desaceleración económica global, lo que anima a los capitales a regresar a activos de alto rendimiento. En este caso, la liquidez que estaba estancada en activos seguros se redirige hacia criptomonedas como activos de crecimiento. La relajación comercial no solo significa un aumento de la confianza, sino que también implica que las empresas tecnológicas que dependen de componentes globales pueden crecer más rápido, lo que beneficia al ecosistema de criptomonedas en su conjunto. Los analistas de Foresight y TradingView afirman que esta interacción político-económica conduce a dos transformaciones clave en la dirección de los capitales. La primera transformación es entre activos tradicionales y digitales, donde el interés por las criptomonedas aumenta en caso de relajación comercial. La segunda transformación es entre Bitcoin y altcoins, donde el optimismo incrementa el apetito por el riesgo para invertir en altcoins de mayor crecimiento y nuevos proyectos. Por lo tanto, cualquier señal política de Washington o Beijing sobre comercio actúa como una señal direccional "Signaling" para los grandes inversores sobre si destinarán su capital al riesgo y crecimiento en el mercado de criptomonedas o lo mantendrán en un estado de cobertura y precaución en los mercados seguros. Esto refuerza el hecho de que el análisis político y económico macro se ha convertido en una herramienta esencial e indispensable para comprender los movimientos del mercado de criptomonedas contemporáneo.
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