El descenso del precio de Bitcoin por debajo del umbral de 110,000 dólares ha provocado una ola de pérdidas profundas en el mercado de criptomonedas, donde el 75% de estas pérdidas provienen de las altcoins. Solo la caída de Ethereum por debajo del nivel de 4,000 dólares causó aproximadamente el 45% del total de las pérdidas.
Y a pesar de las preocupaciones de que la "temporada de altcoins" podría estar llegando a su fin, muchos indicadores técnicos sugieren que lo que está sucediendo podría no ser más que una corrección saludable dentro de un ciclo más amplio.
Según los datos de Vector, después de que Ethereum mantuvo su dominancia de mercado durante 79 días, la trayectoria cíclica comenzó a inclinarse nuevamente a favor de Bitcoin. En el último ciclo, el ascenso de Ethereum duró 68 días, durante los cuales subió de 2,200 dólares a un pico de 4,900 dólares, antes de que el control regresara gradualmente a Bitcoin.
Pero este cambio en la dominancia no significa que las altcoins hayan agotado sus oportunidades. Los analistas ven que la estabilidad de Bitcoin es un requisito esencial para que el impulso vuelva al mercado, y entonces las altcoins podrían recuperar su ascenso con fuerza.
El análisis técnico respalda este escenario optimista. El conocido analista Moustache afirma que un gran número de altcoins está a punto de formar un patrón técnico clásico conocido como "la taza con asa", que es uno de los patrones alcistas más destacados en los mercados financieros. Agrega que la fase de consolidación de este patrón ha durado casi cuatro años, lo que sugiere que el próximo impulso podría ser histórico, incluso si el ruido a corto plazo oculta esta imagen.
Los datos de Swissblock también refuerzan esta perspectiva; su indicador "Pulse Aggregator", que mide el movimiento de precios de más de 350 activos digitales, muestra que aproximadamente el 22% de las altcoins están en una fase negativa, lo que coloca al mercado actualmente dentro de un rango de mínimos históricos que varía entre el 15% y el 25%. Este indicador ha logrado desde 2024 identificar con precisión siete puntos de fondo, seguidos por un aumento de Bitcoin del 20-30%, mientras que las altcoins han saltado entre un 50% y un 150%.
Basado en esto, los observadores creen que el mercado no sufre de un desajuste estructural, y que las señales de advertencia son limitadas, lo que convierte la caída actual en una oportunidad valiosa para los inversores a largo plazo. La historia muestra que las altcoins tienden a mostrar mayor resiliencia que Bitcoin después de que finalizan las olas de corrección, y que la paciencia en tales períodos puede ser la clave para rendimientos excepcionales.
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