¿Por qué los pequeños inversores en criptomonedas no pueden evitar abrir operaciones con frecuencia?
No hables de "adicción al trading", la esencia es la pobreza——
Pobreza que no te permite dejar pasar ningún movimiento en el gráfico que parezca rentable.
No es un problema de personalidad, es una elección inevitable por falta de capital.
Las finanzas tradicionales hablan del valor del tiempo, la economía habla de la utilidad marginal.
En el mundo de las criptomonedas, es más directo: los 100,000 de ahora y los 100,000 de dentro de cinco años, no son lo mismo.
Después de todo, nadie puede garantizar que dentro de cinco años las criptomonedas seguirán existiendo o que los intercambios no se irán a la quiebra.
La inversión en valor dice: "Mantén criptomonedas de calidad y espera los rendimientos compuestos."
Pero los pequeños inversores no pueden esperar. Con tres o cinco mil de capital, incluso con un 30% anual, duplicar el capital tarda tres años.
¿Tres años? Con los ciclos de mercado y las urgencias de la vida, ya te habrán agotado.
Más realista: ¿De dónde salen tantas "oportunidades seguras" en el mundo de las criptomonedas?
Volatilidad 24 horas, contratos apalancados, criptomonedas de bajo valor que suben y bajan, cada día hay tentaciones de "perder si se pierde la oportunidad".
Lo que los pequeños inversores quieren no es una ganancia estable, es un rápido retorno——con poco capital, si no arriesgas, ¿de dónde vendrá la próxima ronda de fichas?
Así que los pequeños inversores no deberían hablar de tasas de ganancia, solo pueden calcular las probabilidades:
Un contrato que triplica su valor equivale a diez pequeñas ganancias; atrapar una criptomoneda de cien veces, ahorra cinco años.
Las altas probabilidades siempre están ligadas a bajas tasas de ganancia, como un apalancamiento de 100 veces, o recuperas lo perdido o te quedas en bancarrota de inmediato.
El Texas Hold'em de las criptomonedas: solo tienes ese poco margen, no puedes diversificar como las instituciones.
¿Moler lentamente el capital? Muerte lenta.
Relaja las condiciones para abrir operaciones, arriesga más veces, utiliza técnicas de toma de ganancias y stop loss para cubrir las brechas en la tasa de ganancia.
Hablando claro, el trading frecuente no es vergonzoso.
Lo vergonzoso es: arriesgar diez veces y no conseguir nada, abrir operaciones solo con intuición, y culpar a los "manipuladores" cuando se quiebra.
No es un problema de frecuencia de trading, es falta de habilidad.