El scalping es una estrategia de trading a corto plazo que implica realizar numerosas operaciones pequeñas a lo largo del día para capturar mínimos movimientos de precio. Los traders que utilizan este enfoque, conocidos como scalpers, buscan obtener ganancias de cambios rápidos en el precio al entrar y salir de posiciones en minutos—o incluso segundos. Esta estrategia es popular en mercados altamente líquidos como forex, acciones y criptomonedas, donde los spreads ajustados y la ejecución rápida son cruciales.

El scalping se basa en el análisis técnico, incluyendo indicadores como promedios móviles, Bandas de Bollinger y RSI, para identificar puntos de entrada y salida. Dado que las operaciones se mantienen por un tiempo muy corto, el scalping minimiza la exposición al riesgo del mercado pero requiere alta concentración, toma de decisiones rápidas y una plataforma de trading confiable con baja latencia.

Debido a su naturaleza intensa, el scalping puede no ser adecuado para principiantes. Exige disciplina, reflejos rápidos y una fuerte gestión del riesgo para evitar pérdidas por fluctuaciones rápidas del mercado. El momento adecuado y la consistencia son clave para el éxito.