Escucha, ocurrió algo interesante el otro día en los Estados Unidos. El 13 de junio de 2025, la SEC estadounidense (Comisión de Valores y Bolsa) abolió de repente toda una serie de reglas que limitaban la industria de las criptomonedas durante la administración de Biden. Hablamos de 14 iniciativas, incluidas varias disposiciones clave que han afectado más al negocio cripto.
Todo esto es parte de una nueva política que Trump está promoviendo activamente ahora: la idea es hacer de los Estados Unidos un líder en el campo de los activos digitales. El nuevo jefe de la SEC, Paul Atkins, está claramente dispuesto a un enfoque más suave y flexible hacia el mercado cripto.
¿Qué exactamente fue cancelado?
Dos reglas hicieron más ruido.:
La regla 3b-16. Amplió tanto la definición de "intercambio" que incluso los protocolos DeFi y los chats que discuten el intercambio de tokens cayeron bajo ella. Resultó que cualquier desarrollador que escribiera código de código abierto corría el riesgo de ser regulado por la SEC. En la industria, esto se percibió como una amenaza directa.
La regla de almacenamiento. Obligó a los consultores a almacenar los activos cripto de los clientes solo con custodios "oficiales" (la mayoría de las veces con bancos). Esto, de hecho, desplazó a empresas cripto como Coinbase Custody y hizo que el mercado fuera menos competitivo.
Además de estas dos, se cancelaron otras propuestas relacionadas con la divulgación de información, transacciones de valores tokenizados y riesgos climáticos: todas parte de un programa más amplio de desregulación.
¿Por qué cambió de opinión la SEC?
Hubo muchas personas descontentas incluso dentro de la comisión. La comisionada Hester Pierce dijo sin rodeos que la SEC no puede convertir a los desarrolladores de código en criminales. Dicen que escribir software no es lo mismo que gestionar un intercambio.
Curiosamente, incluso algunos demócratas admitieron que las reglas carecían de especificidad. Esto significa que difícilmente podrían funcionar de manera efectiva y no crearían claridad legal.
¿Cómo reaccionó el mercado?
La industria reaccionó violentamente. Proyectos DeFi como Uniswap y Curve respiraron aliviados. Startups y fondos de inversión como Andreessen Horowitz ya han declarado que esto es una "victoria para el liderazgo tecnológico estadounidense." Se espera un nuevo flujo de inversiones y lanzamientos de proyectos en los Estados Unidos.
Por otro lado, los jugadores tradicionales — bancos, gestores de activos — están decepcionados. Les convenía actuar según las viejas reglas, que les daban más control.
Los abogados tampoco están entusiasmados: advierten que los cambios de política repentinos pueden asustar a los inversores. ¿Quién quiere construir un negocio en un país donde las regulaciones cambian drásticamente cada dos años?
¿Qué sigue?
La SEC no va a abandonar completamente la supervisión. Ahora están pasando a un enfoque punto por punto: para averiguar cuáles tokens son valores y cuáles no. También hay coordinación con otras agencias respecto a la regulación de las stablecoins.
En lugar de controles estrictos, la SEC promete utilizar nuevas herramientas para detectar fraudes sin obstaculizar el desarrollo de DeFi. Pero hay un gran problema: aún no hay reglas claras. Esto crea un vacío en el que los proyectos de buena fe no saben cómo actuar, y los inescrupulosos pueden aprovecharse de ello.
Resulta que el mercado cripto tiene libertad, pero no hay pautas claras.
El sector ha entrado en una nueva era, más abierta, pero llena de incertidumbre. ¿Crees que este es el comienzo de un diálogo constructivo entre el gobierno y la industria, o solo un alivio temporal antes de otra ola de presión?