Mientras la escasez de mano de obra golpea al sector construcción en República Dominicana, una nueva demanda sacude el sistema: “Queremos papeles y que nos paguen en criptomonedas”, dicen los obreros haitianos que han sostenido la obra gris del país durante décadas.
El drama laboral se transforma en una revolución financiera.
Los albañiles, maestros constructores e ingenieros capacitados no solo exigen regularización migratoria, sino también remuneración en monedas digitales como USDT, BTC y ETH.
¿Por qué? Confianza, libertad y resguardo ante la inflación.
¿Estamos frente al nacimiento del albañil Web3?
Sí. La criptomoneda ya no es solo para traders. Ahora construye casas, puentes y edificios. Si la tendencia se impone, las constructoras deberán actualizarse o quedarse sin manos para edificar.