Mientras muchos solo ven cifras, los que conocen XRP saben que es mucho más que una moneda: es una revolución financiera en tiempo real.
Hoy, XRP sigue demostrando que no necesita hype para mantenerse firme. Rápido, eficiente y con tarifas mínimas —en un ecosistema donde cada segundo y cada centavo cuentan, XRP es el arma secreta de los traders pacientes y los creyentes en el futuro de las remesas globales.
Mi opinión sobre XRP:
XRP es una de las criptomonedas más infravaloradas por el mercado retail, pero sigue teniendo una base tecnológica muy sólida. Su enfoque en pagos internacionales rápidos y baratos le da una utilidad clara, a diferencia de muchas criptos puramente especulativas. Sin embargo, su crecimiento ha estado frenado por los problemas legales con la SEC y la narrativa negativa en redes.
Si Ripple logra establecerse como un estándar en transferencias globales, XRP podría tener un segundo gran ciclo alcista. Pero no es una apuesta segura ni rápida; es para inversores con visión de largo plazo.