#sol Mientras que ambas son criptomonedas prominentes, Bitcoin (BTC) y Solana (SOL) difieren significativamente en su enfoque principal y arquitectura técnica. Bitcoin, lanzado en 2009, a menudo se refiere como "oro digital" y funciona principalmente como un almacén de valor descentralizado y un sistema de efectivo electrónico de igual a igual. Su blockchain opera bajo un mecanismo de consenso de Prueba de Trabajo (PoW), que, aunque es altamente seguro, resulta en velocidades de transacción más lentas (alrededor de 7 transacciones por segundo) y un mayor consumo de energía. Bitcoin tiene un suministro limitado de 21 millones de monedas. Actualmente, 1 SOL se cotiza a aproximadamente 0.0015 BTC.
Solana, lanzado en 2020, está diseñado como una blockchain de alto rendimiento enfocada en la escalabilidad y la velocidad para aplicaciones descentralizadas (dApps). Emplea un mecanismo de consenso híbrido único que combina Prueba de Historia (PoH) y Prueba de Participación (PoS), permitiendo velocidades de transacción significativamente más rápidas, teóricamente hasta 65,000 transacciones por segundo, con tarifas de transacción mucho más bajas. Solana aspira a ser una plataforma para diversos casos de uso, incluyendo DeFi, NFT y aplicaciones Web3. A diferencia de Bitcoin, Solana tiene un modelo tokenómico inflacionario, con su suministro creciendo a un ritmo predeterminado. A partir de hoy, 1 SOL se valora en alrededor de $146.50, con una capitalización de mercado de $75.83 mil millones, mientras que la capitalización de mercado de Bitcoin se sitúa en un sustancial $1.38 billones.