Según PANews, la actualización Fusaka de Ethereum está atrayendo atención por sus mejoras enfocadas en la ingeniería, destinadas a reducir costos y mejorar la eficiencia sin introducir nuevos paradigmas o conceptos. A diferencia de actualizaciones anteriores como la transición de PoW a PoS o la actualización Dencun, Fusaka se centra en optimizaciones prácticas para abordar problemas específicos.

La actualización reduce significativamente los costos de la Capa 2 (L2), principalmente asociados con los gastos de disponibilidad de datos (DA) para publicar datos en la Capa 1 (L1). Fusaka logra esto a través de una expansión ocho veces mayor utilizando tecnología Blob y verificación de muestreo aleatorio PeerDAS, reduciendo sustancialmente los costos de L2. Si bien algunos creen que reducir las tarifas de L2 por sí solo no es suficiente para impulsar la actividad del ecosistema, el impacto de la actualización en cadenas de aplicaciones específicas podría estimular el crecimiento en áreas como la infraestructura de activos del mundo real y ecosistemas de pago.

Además, la normalización de las tarifas de Blob y la introducción de una tarifa base mínima de Blob (EIP-7918) buscan reavivar las expectativas de quema de ETH. A pesar de que la actualización de Dencun condujo a un cambio temporal de deflación a leve inflación, Fusaka asegura que ETH continúa quemándose incluso cuando la demanda de Blob es baja, lo que podría llevar a un retorno a los niveles de quema previos a Dencun y reforzar la narrativa de Ethereum como una capa de liquidación global.

La actualización también aumenta el límite de gas a 60 millones, mejorando el rendimiento de L1. Si bien las mejoras en TPS de Ethereum pueden parecer modestas en comparación con otras blockchains, el cambio de una estrategia centrada en Rollup a un enfoque de doble vía de liquidación L1 y ejecución L2 ofrece mayor flexibilidad y potencial.

Además, PeerDAS reduce el umbral de validadores en un 85%, promoviendo la descentralización y abordando preocupaciones sobre el control institucional sobre Ethereum. Esta implementación ligera del concepto de fragmentación de Ethereum reduce la carga de los nodos, mejora la escalabilidad y elimina las barreras técnicas para la participación institucional, lo que podría llevar a una mayor participación de gigantes de las finanzas tradicionales como Fidelity y BlackRock.

En general, la actualización de Fusaka posiciona a Ethereum como una blockchain más madura, estable y eficiente, capaz de expansión institucional, desarrollo de doble vía y captura de valor micro-deflacionario. La pregunta sigue siendo si este $ETH mejorado merece una renovada confianza.