Según PANews, el Primer Ministro del Reino Unido, Sir Keir Starmer, ha anunciado una iniciativa de identidad digital obligatoria que requiere que los trabajadores en el Reino Unido lleven identificación digital en sus dispositivos móviles. Se espera que el plan se implemente completamente al final de la sesión parlamentaria en 2029. Este anuncio ha suscitado un debate entre expertos en tecnología y defensores de la privacidad, quienes expresan preocupaciones sobre los posibles riesgos de seguridad y la expansión de la vigilancia.

Rob Jardin, Director Digital en NymVPN, advierte que los sistemas de identidad centralizados, que incorporan datos biométricos y permisos de acceso a servicios, podrían convertirse en objetivos significativos para los hackers. Él señala que si tales sistemas son comprometidos, los individuos enfrentan riesgos considerables, ya que los datos biométricos no pueden ser cambiados una vez que se han filtrado. Además, las identidades digitales podrían extenderse más allá de la identificación para rastrear movimientos y controlar el acceso a servicios.

Por el contrario, algunos expertos argumentan que los sistemas bien diseñados pueden mejorar la seguridad. Cindy van Niekerk, CEO de Umazi, sugiere que la encriptación avanzada y la monitorización continua pueden construir una infraestructura resiliente. Ella enfatiza que las identidades digitales pueden utilizar credenciales encriptadas para la verificación de identidad, permitiendo a los ciudadanos controlar el intercambio de información. Además, los sistemas que integran la verificación y el almacenamiento descentralizado pueden reducir los riesgos de violaciones de datos, mientras que las arquitecturas descentralizadas pueden fortalecer la resistencia contra las amenazas de la computación cuántica.