Según PANews, el 17 de junio, el Senado de EE. UU. aprobó el "Acta de Innovación Nacional de Stablecoins" con una votación de 68 a favor y 30 en contra. Esta legislación tiene como objetivo establecer directrices regulatorias para las stablecoins vinculadas al dólar estadounidense. La ley exige que cada stablecoin emitida debe estar respaldada por una cantidad equivalente de activos seguros y de alta liquidez e integra las stablecoins en los marcos regulatorios anti-lavado de dinero y financieros.
Los analistas sugieren que las stablecoins podrían aliviar las presiones de deuda en EE. UU. y aumentar la influencia del dólar en el sistema financiero global. Sin embargo, también advierten sobre riesgos sistémicos y desafíos regulatorios. Si no se diseñan adecuadamente, las stablecoins podrían ser mal utilizadas como herramientas de apalancamiento para aumentar la deuda, retrasando la resolución de los problemas inherentes del dólar. Además, podrían socavar potencialmente la soberanía monetaria de otros países, lo que llevaría a una acumulación de riesgos y efectos adversos en el sistema financiero de EE. UU.