Según ChainCatcher, fuentes informaron que Trump recibió una llamada del presidente turco Erdoğan mientras asistía a la cumbre del G7 en Canadá. Erdoğan propuso celebrar conversaciones entre funcionarios de EE. UU. e Irán en Estambul, a lo que Trump accedió y expresó su disposición a enviar al vicepresidente Pence y al enviado de la Casa Blanca, Hook, a la reunión.

Un funcionario de la Casa Blanca afirmó que Trump había recibido señales a través de canales secretos de que los iraníes querían reunirse. Erdoğan iba a transmitir la propuesta al presidente iraní Raisi y al ministro de Relaciones Exteriores Zarif, pero no se obtuvo autorización porque no se pudo contactar al líder supremo de Irán, Jamenei.

Irán informó a Turquía que las conversaciones fueron canceladas. Posteriormente, Trump llamó a la evacuación de Teherán en las redes sociales. Erdoğan instó al ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Zarif, a tener conversaciones directas con el gobierno de Trump, y expresó que Turquía estaba dispuesta a facilitar las negociaciones.