Según PANews, la tendencia de las empresas públicas que establecen tesorerías de criptomonedas se está expandiendo más allá de Bitcoin para incluir una gama más amplia de tokens digitales, con la escala de asignaciones en continuo crecimiento. Recientemente, dos empresas que cotizan en bolsa anunciaron planes para adquirir XRP para sus tenencias de tesorería, mientras que otra empresa está comprando ETH como reserva.

A lo largo del año, las empresas de tesorería de Bitcoin han hecho titulares con frecuencia, siendo Strategy (anteriormente Microstrategy) quien lidera la carga. VivoPower y Webus, que cotiza en Nasdaq, han declarado intenciones de iniciar tesorerías de XRP de $100 millones y $300 millones, respectivamente, mientras que SharpLink está estableciendo una tesorería de ETH de $425 millones.

Galaxy Research ha identificado 28 empresas de tesorería de criptomonedas, incluyendo 20 enfocadas en BTC, 4 en SOL, 2 en ETH y 2 en XRP. A pesar del impulso y el interés del mercado en financiar estas empresas con activos sustanciales, persiste el escepticismo, particularmente en lo que respecta a la fuente de fondos para algunas compras: la deuda.

Varias empresas dependen de fondos prestados, principalmente notas convertibles a cero y bajo interés, para adquirir activos de tesorería. Estas notas pueden convertirse en capital de la empresa por los inversores si están 'en el dinero' al vencimiento, lo que significa que el precio de las acciones de la empresa supera el precio de conversión. Sin embargo, si las notas están 'fuera del dinero' al vencimiento, se necesitan fondos adicionales para cubrir pasivos, lo que genera preocupaciones sobre las estrategias de las empresas de tesorería.

Además, existe el riesgo de que estas empresas carezcan de suficiente efectivo para pagar los intereses de sus deudas. Las empresas de tesorería tienen cuatro opciones principales: vender reservas de criptomonedas para aumentar efectivo, emitir nueva deuda para refinanciar pasivos antiguos, emitir nuevas acciones para cubrir pasivos, o incumplir si las reservas no cubren completamente los pasivos.

En el peor de los casos, el camino que tome cada empresa dependerá de circunstancias específicas y condiciones del mercado, como la viabilidad de la refinanciación. A diferencia de las estrategias impulsadas por la deuda, las ventas de acciones para compras de activos plantean menos preocupaciones, ya que no crean pasivos ni obligaciones de incumplimiento.

Un informe reciente sobre el panorama de apalancamiento cripto examinó la escala y los cronogramas de vencimiento de las deudas emitidas por las empresas de tesorería de Bitcoin. Los hallazgos sugieren que la amenaza inminente percibida está exagerada, ya que la mayoría de las deudas vencen entre junio de 2027 y septiembre de 2028.

Si bien las preocupaciones sobre las estrategias impulsadas por la deuda no son infundadas, dada la historia de la industria con el apalancamiento, los métodos actuales parecen no conllevar un riesgo significativo. Sin embargo, a medida que las deudas vencen y más empresas adoptan esta estrategia, pueden surgir enfoques de mayor riesgo, potencialmente involucrando la emisión de deuda a corto plazo. Incluso en escenarios adversos, las empresas tienen opciones financieras tradicionales para enfrentar desafíos sin recurrir a la venta de activos.