Según Cointelegraph, el ecosistema de Ethereum está explorando una estrategia de cumplimiento modular para alinear las blockchains públicas con el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) de la Unión Europea. Una propuesta del miembro de la comunidad de Ethereum, Eugenio Reggianini, sugiere utilizar una arquitectura modular para mejorar la gestión de datos y la privacidad. Este enfoque implica descentralizar los datos personales hacia los bordes, como billeteras y aplicaciones descentralizadas (DApps), empleando almacenamiento fuera de la cadena con eliminación de metadatos y dividiendo roles criptográficamente. Esta estrategia busca concentrar las responsabilidades del controlador del GDPR en un número limitado de entidades, mientras que la red más amplia funciona como procesadores o permanece fuera del alcance del GDPR.
La transición a una arquitectura modular podría facilitar la integración de tecnologías que mejoran la privacidad (PETs) dentro de Ethereum, logrando potencialmente el cumplimiento del GDPR en entornos de blockchain sin permisos. Reggianini destaca varias tecnologías que están siendo integradas o propuestas para Ethereum para minimizar la exposición de datos personales. Estas incluyen proto-danksharding (EIP-4844), que limita la duración de los blobs de transacción a aproximadamente 18 días, haciendo cumplir la minimización del almacenamiento. Además, los Argumentos de Conocimiento Cero Sucesivos No Interactivos (zk-SNARKs) pueden mejorar la privacidad al permitir que los validadores confirmen pruebas criptográficas sucintas sin acceder a las cargas útiles de las transacciones, reduciendo significativamente la visibilidad de los datos en la cadena.
Otros PETs que podrían ayudar en el cumplimiento del GDPR incluyen la Encriptación Totalmente Homomórfica, Entornos de Ejecución Confiables (TEEs), computación multipartita (MPC), Separación Proponente-Constructor (PBS) y Muestreo de Disponibilidad de Datos entre Pares (PeerDAS). La propuesta describe las implicaciones del GDPR a través de las tres capas de Ethereum: la capa de ejecución, la capa de consenso y la capa de disponibilidad de datos. La capa de ejecución actuaría como procesadores, transmitiendo solo datos cifrados o enmascarados, mientras que la capa de consenso se centraría en validar compromisos y pruebas de conocimiento cero. La capa de disponibilidad de datos, bajo PeerDAS, almacenaría fragmentos anónimos por períodos limitados, alineándose con el principio de minimización de datos del GDPR.
Al concentrar la controlabilidad de los datos en la capa de aplicación y utilizar PETs, Ethereum busca salvaguardar la privacidad del usuario sin comprometer sus principios fundamentales, según Reggianini. Sin embargo, el éxito de este marco depende de la adopción generalizada por parte de la comunidad, el apoyo de los desarrolladores y la posible alineación con los reguladores de la UE.