Según BlockBeats, el Banco de Japón está contemplando desacelerar el ritmo de reducción de sus compras de bonos a partir del próximo año fiscal. Este movimiento tiene como objetivo prevenir disrupciones significativas en el mercado de bonos. El mes pasado, los rendimientos de los bonos gubernamentales de Japón a muy largo plazo alcanzaron niveles récord, reflejando las preocupaciones de los inversores sobre el deterioro de las finanzas públicas del país. Fuentes indican que no hay consenso dentro del Banco de Japón, con algunos funcionarios abogando por una intervención continua en el mercado de bonos y otros favorables a mantener el ritmo actual. La decisión final se tomará en la próxima reunión de política el 16-17 de junio, donde el banco evaluará el plan de reducción actual, que se extiende hasta marzo, y propondrá un plan subsecuente para después de abril de 2026.