Según Odaily, el presidente de EE. UU., Donald Trump, ha expresado una fuerte desaprobación por una reciente decisión del Tribunal de Comercio Internacional de EE. UU. respecto a sus políticas comerciales. Trump describió el fallo como increíblemente desfavorable para los Estados Unidos, criticándolo como erróneo y políticamente motivado. Notó que un panel de 11 jueces de la Corte de Apelaciones del Circuito Federal de EE. UU. ha suspendido temporalmente la decisión.
Trump espera que la Corte Suprema anule rápidamente lo que considera un fallo peligroso que amenaza los intereses nacionales. Enfatizó que la decisión implica que debe obtener la aprobación del Congreso para imponer aranceles, lo que argumenta socavaría la autoridad presidencial. Trump advirtió que si se permitiera este proceso, involucraría a cientos de políticos en Washington deliberando durante semanas o meses sobre cómo abordar las prácticas comerciales desleales de otros países, alterando fundamentalmente el papel presidencial.