Según informes de Jin10, la inflación del consumo en el área metropolitana de Tokio aumentó en mayo, con un IPC núcleo que subió un 3.6% interanual, superior a la expectativa del mercado del 3.5%. Los datos del IPC de Tokio se consideran un indicador anticipado de la tendencia nacional en Japón.

El Banco de Japón ha revisado recientemente sus previsiones de precios, anticipando que los aranceles de Estados Unidos afectarán el crecimiento económico. El Banco de Japón se ha vuelto más cauteloso respecto al impacto de la inflación de los alimentos en los precios de consumo en general, prestando especial atención al aumento del precio del arroz.

El gobernador del Banco de Japón, Kazuo Ueda, ha declarado que, aunque se espera que la inflación de los alimentos se alivie, se debe prestar atención a cómo el aumento de los precios de los alimentos afecta a la inflación subyacente en Japón.