Según BlockBeats, la reciente volatilidad del mercado se ha visto influenciada por la fluctuación del sentimiento de riesgo. Desde finales de abril, los activos de riesgo han aumentado de forma constante, con el S&P 500 acercándose a los 6000 puntos. Sin embargo, la inesperada propuesta del presidente estadounidense, Donald Trump, de aumentar los aranceles sobre los productos de la UE al 50% perturbó la estabilidad del mercado. Si bien la fecha límite para la implementación de los aranceles se extendió hasta el 9 de julio, la medida puso de relieve el potencial disruptivo de los riesgos políticos.
La inflación sigue siendo un foco macroeconómico clave. Los datos del PCE del viernes serán cruciales para determinar la dirección de la política monetaria de la Reserva Federal. A pesar de la caída de los precios del petróleo, la congestión en los puertos europeos se está extendiendo globalmente, lo que podría incrementar los costos de transporte marítimo y generar nuevas presiones inflacionarias.
En el sector de las criptomonedas, el precio de Bitcoin retrocedió a $ 106,000 durante el fin de semana antes de recuperarse rápidamente a $ 110,000, respaldado por 30 días consecutivos de entradas netas en ETF al contado, particularmente IBIT de BlackRock.
Cabe destacar que, si bien el rendimiento de Bitcoin se mantiene estable, las acciones tecnológicas están experimentando divergencias. TQQQ ha sufrido ventas masivas de forma constante desde abril, lo que indica que algunos inversores están rotando o cubriendo sus posiciones. En medio de la turbulencia política global, los criptoactivos están demostrando una mayor madurez.