En el mundo de las criptomonedas, la elección entre un CEX (Centralized Exchange) y un DEX (Decentralized Exchange) es crucial y depende de las prioridades del usuario.

CEX (Centralized Exchange)

Un CEX es una plataforma operada por una empresa, actuando como intermediario. Ofrece facilidad de uso, alta liquidez y a menudo permite operar con dinero fiduciario. Sin embargo, requiere verificación de identidad (KYC) y los usuarios no tienen el control total de sus fondos, ya que el CEX los custodia. Ejemplos incluyen Binance y Coinbase.

DEX (Decentralized Exchange)

Un DEX permite transacciones directas entre usuarios a través de contratos inteligentes en la blockchain, sin un intermediario central. Esto proporciona mayor privacidad, autocustodia de los fondos y resistencia a la censura. Las desventajas suelen ser una menor liquidez, interfaces más complejas y, a veces, velocidades de transacción más lentas. Uniswap y PancakeSwap son ejemplos de DEX.

En resumen, los CEX priorizan la comodidad y la liquidez con un intermediario, mientras que los DEX enfatizan la autonomía y la privacidad a través de la descentralización.