Desde su creación, Ethereum se ha enfrentado a un dilema principal: ¿cómo mantener su descentralización mientras aumenta su capacidad de procesamiento? Hoy, un investigador de la Fundación Ethereum, Dankrad Feist, propone una iniciativa ambiciosa: EIP-9698, un plan de cuatro años para aumentar 100 veces el límite de gas de la red y llevar a Ethereum a una velocidad teórica de 2.000 transacciones por segundo. Una pequeña revolución técnica… pero también estratégica